La Nominación al Grammy Latino del Experimentado "Bobby Valentín" en la Categoría del "Jazz Latino" con la producción “Mind of a Master” es otro reconocimiento de honor a su carrera musical de medio siglo como arreglista y director de orquesta.
“Mind of a Master” es la producción con la cual Bobby Valentín entra en competencia en la decimonovena jornada del Grammy Latino. (archivo Fundación Nacional para la Cultura Popular)
Bobby, nominado el año pasado en el rubro de la salsa con “Mi ritmo es bueno”, es uno de los cinco aspirantes al Latin Grammy en el apartado ‘Mejor Álbum de Jazz Latino’.
Los otros finalistas son el también boricua Néstor Torres (“Jazz Flute Traditions”), Adrian Laies (“La casa de un pianista de jazz”), Dafnis Prieto (“Back To The Sunset”) y Hermeto Pascoal (“Naturaleza universal”).
En conversación con este medio, Bobby dijo que de inmediato capitalizará la nominación para promover el disco en festivales internacionales.
“Hemos enviado a varios festivales en Estados Unidos un reporte de lo que es el disco y mi trayectoria. Estamos esperando respuestas. Ahora mismo tengo una presentación en la Interamericana el miércoles 17 de octubre que se celebran los 20 años del Departamento de Música y hay una persona interesada para ir a Costa Rica. Es lento, pero tengo mucha fe de que seguirán apareciendo cositas. Es otro público el del latin jazz, aunque sé que a mucha gente que le gusta la salsa le agrada”.
El Rey del Bajo acotó que se siente como si hubiese ganado el preciado fonógrafo dorado. “La nominación de lo que es un disco de salsa es otro estilo. Este es otra esquina. Lo que digo es que después que uno esté compitiendo, aunque no salga ganador, la competencia es buena al igual que ser nominado entre tantas producciones. Para mí la competencia en el latin jazz es más fuerte que en la salsa”.
Bobby presenta “Mind Of A Master” junto a The Latin Jazzists, que en su mayor parte son los músicos de su orquesta de salsa, como Angie Machado y Eliud Cintrón. A Bobby no le preocupa que los puristas argumenten que no son solistas de jazz.
“Los músicos están contentos. Es un género que les gusta. Aquí se han preocupado más por proyectar sus estilos y expresiones”, reacciona Bobby.
Un músico de salsa puede tocar jazz. Así lo sustenta la historia. Mongo, Puente, Machito, Mario Bauzá, Mario Rivera, Eddie Palmieri, Hilton Ruiz y Jerry González, entre otros, iniciaron en el mambo y en la música afrocaribeña bailable, previo a su incursión en el jazz.
“Al igual que Ray Barretto, que también estuvo ligado al jazz. Finalmente, todos buscamos esa esquina. El mismo Néstor Torres, que comenzó con Batacumbele. Después que uno ha hecho tantas cosas en el género tropical, uno busca satisfacerse como músico buscando otra esquina”.
El jazz, sin embargo, no es nuevo para Bobby Valentín. “Latin Gravy”, “Codazos”, “Shinny Stockins” y “Maiden Voyage” son varias de las obras grabadas en sus discos de salsa.
“Siempre me llamaba la atención. Cuando estuve en Nueva York, el latin jazz era mambo jazz. Después el nombre cambió, pero antes se hacía para el bailador, aunque había solos. Ya dejó de ser para el bailador. Ahora la gente se sienta a escucharlo. Fue un buen cambio”.
Bobby no ha decidido si viajará a Las Vegas para estar presente en la ceremonia de premiación, a celebrarse en noviembre.
“Aún no creo. No es porque vaya a ganar o no. Estar compitiendo aunque no gane es motivo de alegría. Me siento bien contento. Todavía no tengo planes”.
El próximo miércoles 17 se presentará con The Latin Jazzists en el Festival de Jazz de la INTER Metro. Esa noche interpretará la secuencia de “Mind Of A Master”.
“Me siento muy contento. Este disco es como un bebé para mí. Aunque hemos tocado música tropical, este es un bebé nuevo y que sea nominado al Latin Grammy me hace sentir muy feliz”.